Soy fisiognomista, consultora de Feng Shui, terapeuta de Flores de Bach y simboanálisis. Desde el 1980 he desarrollado mi trabajo en diversos centros y desde el 2009 tengo mi propio espacio.
Todo empezó cuando tenía 15 años y empecé a trabajar en el Instituto Psicológico Montserrat, mientras estudiaba el bachillerato nocturno. Allí descubrí la fisiognomía. En ese entonces era una adolescente muy tímida y muy acomplejada por mi nariz, siempre pensé que cuando ganase dinero lo primero que haría sería operarme. Al estudiar fisiognomía y descubrir que en nuestro rostro todo está escrito, descubrí que el tipo de nariz que yo tenía me ayudaba y vi claro que nunca me operaría. Comprendí mis cualidades y cómo sentirme cada día más segura de mi misma.
Desde entonces he ayudado a muchas personas a conocerse, a valorar sus capacidades y saber qué profesión les haría sentirse más felices y realizados.
Poco a poco fui adentrándome en el mundo de la simbología. Todas nuestras experiencias, tanto las positivas como las negativas, programan nuestra vida futura. He dedicado mucho tiempo a investigar un sistema que permitiese borrar las pautas negativas que están en nuestra mente y liberarnos de esa programación. En la década del 80 creé un nuevo sistema: el Simboanalisis. Este método combina la visualización creativa y la relajación, y nos permite anular todas esas programaciones negativas y limpiar el inconsciente.
Hasta este momento nunca había oído hablar de Feng Shui y recuerdo que, hace ya más de 20 años, que en la misma semana me llegaron noticias por dos caminos diferentes. La primera fue a través de un artículo en el periódico de La Vanguardia y la segunda, por una persona que me dijo que iba a realizar Feng Shui en su casa. En ambas situaciones mi cara fue de una gran incredulidad.
Soy fisiognomista, consultora de Feng Shui, terapeuta de Flores de Bach y simboanálisis. Desde el 1980 he desarrollado mi trabajo en diversos centros y desde el 2009 tengo mi propio espacio.
Todo empezó cuando tenía 15 años y empecé a trabajar en el Instituto Psicológico Montserrat, mientras estudiaba el bachillerato nocturno. Allí descubrí la fisiognomía. En ese entonces era una adolescente muy tímida y muy acomplejada por mi nariz, siempre pensé que cuando ganase dinero lo primero que haría sería operarme. Al estudiar fisiognomía y descubrir que en nuestro rostro todo está escrito, descubrí que el tipo de nariz que yo tenía me ayudaba y vi claro que nunca me operaría. Comprendí mis cualidades y cómo sentirme cada día más segura de mi misma.
Desde entonces he ayudado a muchas personas a conocerse, a valorar sus capacidades y saber qué profesión les haría sentirse más felices y realizados.
Poco a poco fui adentrándome en el mundo de la simbología. Todas nuestras experiencias, tanto las positivas como las negativas, programan nuestra vida futura. He dedicado mucho tiempo a investigar un sistema que permitiese borrar las pautas negativas que están en nuestra mente y liberarnos de esa programación. En la década del 80 creé un nuevo sistema: el Simboanalisis. Este método combina la visualización creativa y la relajación, y nos permite anular todas esas programaciones negativas y limpiar el inconsciente.
Hasta este momento nunca había oído hablar de Feng Shui y recuerdo que, hace ya más de 20 años, que en la misma semana me llegaron noticias por dos caminos diferentes. La primera fue a través de un artículo en el periódico de La Vanguardia y la segunda, por una persona que me dijo que iba a realizar Feng Shui en su casa. En ambas situaciones mi cara fue de una gran incredulidad.
Soy fisiognomista, consultora de Feng Shui, terapeuta de Flores de Bach y simboanálisis. Desde el 1980 he desarrollado mi trabajo en diversos centros y desde el 2009 tengo mi propio espacio.
Todo empezó cuando tenía 15 años y empecé a trabajar en el Instituto Psicológico Montserrat, mientras estudiaba el bachillerato nocturno. Allí descubrí la fisiognomía. En ese entonces era una adolescente muy tímida y muy acomplejada por mi nariz, siempre pensé que cuando ganase dinero lo primero que haría sería operarme. Al estudiar fisiognomía y descubrir que en nuestro rostro todo está escrito, descubrí que el tipo de nariz que yo tenía me ayudaba y vi claro que nunca me operaría. Comprendí mis cualidades y cómo sentirme cada día más segura de mi misma.
Desde entonces he ayudado a muchas personas a conocerse, a valorar sus capacidades y saber qué profesión les haría sentirse más felices y realizados.
Poco a poco fui adentrándome en el mundo de la simbología. Todas nuestras experiencias, tanto las positivas como las negativas, programan nuestra vida futura. He dedicado mucho tiempo a investigar un sistema que permitiese borrar las pautas negativas que están en nuestra mente y liberarnos de esa programación. En la década del 80 creé un nuevo sistema: el Simboanalisis. Este método combina la visualización creativa y la relajación, y nos permite anular todas esas programaciones negativas y limpiar el inconsciente.
Hasta este momento nunca había oído hablar de Feng Shui y recuerdo que, hace ya más de 20 años, que en la misma semana me llegaron noticias por dos caminos diferentes. La primera fue a través de un artículo en el periódico de La Vanguardia y la segunda, por una persona que me dijo que iba a realizar Feng Shui en su casa. En ambas situaciones mi cara fue de una gran incredulidad.
Ya que soy fisionomista, en mi cabeza empezaron a dar vueltas muchas preguntas y reflexiones. Si nuestras caras reflejan nuestro carácter y nuestra personalidad, ¿por qué nuestras casas no podrían reflejar nuestras vidas? ¿Sería posible que cambiando la decoración de nuestras viviendas pudiésemos cambiar nuestras vidas?
Mi intuición me decía que eso podía ser posible y, sin pensarlo dos veces, empecé a leer libros y más libros, todo lo que se había escrito sobre Feng Shui. Comencé a investigar y a comprobar si esto funcionaba, hasta que llegué a la conclusión de que sí era cierto. El plano de una vivienda es, para un experto en Feng Shui, lo mismo que para un médico una radiografía o una analítica.
Una vez analizados los conflictos, si los solventamos, si colocamos los símbolos correspondientes, nuestra vida cambiará.
Desde ese momento el Feng Shui cambió mi vida y ahora forma parte de mí. Pude comprobar en primera persona como los cactus entorpecían las relaciones en mi vida. Y, tras aplicar el Feng Shui, pude transformar esta dureza en amabilidad.
Como consultora de Feng Shui, tras casi 20 años de experiencia impartiendo cursos de Feng Shui y realizando estudios a particulares y empresas, he publicado mi libro “Ordena tu casa, cambia tu vida”. En mi libro te guio paso a paso para que puedas realizar tu misma tu estudio de Feng Shui. El Feng Shui
que enseño es una manera diferente ya que combina la escuela de la forma y la simbología.
A lo largo de estos 40 años, a través de la Fisiognomía, el Simboanálisis y el Feng Shui, he ayudado a muchas personas a que pudieran transformar aquello que deseaban mejorar. Siempre poniéndome en su lugar, acompañándolos de una forma cercana durante todo el camino. Ahora te toca a ti. Es tu oportunidad.
¿Quieres cambiar tu vida? Te invito a que hagamos juntos esta transformación.
Maria Rosa Pérez
Ya que soy fisionomista, en mi cabeza empezaron a dar vueltas muchas preguntas y reflexiones. Si nuestras caras reflejan nuestro carácter y nuestra personalidad, ¿por qué nuestras casas no podrían reflejar nuestras vidas? ¿Sería posible que cambiando la decoración de nuestras viviendas pudiésemos cambiar nuestras vidas?
Mi intuición me decía que eso podía ser posible y, sin pensarlo dos veces, empecé a leer libros y más libros, todo lo que se había escrito sobre Feng Shui. Comencé a investigar y a comprobar si esto funcionaba, hasta que llegué a la conclusión de que sí era cierto. El plano de una vivienda es, para un experto en Feng Shui, lo mismo que para un médico una radiografía o una analítica.
Una vez analizados los conflictos, si los solventamos, si colocamos los símbolos correspondientes, nuestra vida cambiará.
Desde ese momento el Feng Shui cambió mi vida y ahora forma parte de mí. Pude comprobar en primera persona como los cactus entorpecían las relaciones en mi vida. Y, tras aplicar el Feng Shui, pude transformar esta dureza en amabilidad.
Como consultora de Feng Shui, tras casi 20 años de experiencia impartiendo cursos de Feng Shui y realizando estudios a particulares y empresas, he publicado mi libro “Ordena tu casa, cambia tu vida”. En mi libro te guio paso a paso para que puedas realizar tu misma tu estudio de Feng Shui. El Feng Shui
que enseño es una manera diferente ya que combina la escuela de la forma y la simbología.
A lo largo de estos 40 años, a través de la Fisiognomía, el Simboanálisis y el Feng Shui, he ayudado a muchas personas a que pudieran transformar aquello que deseaban mejorar. Siempre poniéndome en su lugar, acompañándolos de una forma cercana durante todo el camino. Ahora te toca a ti. Es tu oportunidad.
¿Quieres cambiar tu vida? Te invito a que hagamos juntos esta transformación.
Maria Rosa Pérez
Ya que soy fisionomista, en mi cabeza empezaron a dar vueltas muchas preguntas y reflexiones. Si nuestras caras reflejan nuestro carácter y nuestra personalidad, ¿por qué nuestras casas no podrían reflejar nuestras vidas? ¿Sería posible que cambiando la decoración de nuestras viviendas pudiésemos cambiar nuestras vidas?
Mi intuición me decía que eso podía ser posible y, sin pensarlo dos veces, empecé a leer libros y más libros, todo lo que se había escrito sobre Feng Shui. Comencé a investigar y a comprobar si esto funcionaba, hasta que llegué a la conclusión de que sí era cierto. El plano de una vivienda es, para un experto en Feng Shui, lo mismo que para un médico una radiografía o una analítica.
Una vez analizados los conflictos, si los solventamos, si colocamos los símbolos correspondientes, nuestra vida cambiará.
Desde ese momento el Feng Shui cambió mi vida y ahora forma parte de mí. Pude comprobar en primera persona como los cactus entorpecían las relaciones en mi vida. Y, tras aplicar el Feng Shui, pude transformar esta dureza en amabilidad.
Como consultora de Feng Shui, tras casi 20 años de experiencia impartiendo cursos de Feng Shui y realizando estudios a particulares y empresas, he publicado mi libro “Ordena tu casa, cambia tu vida”. En mi libro te guio paso a paso para que puedas realizar tu misma tu estudio de Feng Shui. El Feng Shui
que enseño es una manera diferente ya que combina la escuela de la forma y la simbología.
A lo largo de estos 40 años, a través de la Fisiognomía, el Simboanálisis y el Feng Shui, he ayudado a muchas personas a que pudieran transformar aquello que deseaban mejorar. Siempre poniéndome en su lugar, acompañándolos de una forma cercana durante todo el camino. Ahora te toca a ti. Es tu oportunidad.
¿Quieres cambiar tu vida? Te invito a que hagamos juntos esta transformación.
Maria Rosa Pérez
Con Ordena tu casa, cambia tu vida descubrirás el apasionante mundo del Feng Shui. Este libro te ofrece las herramientas apropiadas para mejorar tu vida y resolver todos tus problemas. Paso a paso, de una forma fácil y práctica, aprenderás a aplicar el Feng Shui en tu hogar.
Aplicando el mapa Bagua en el plano de tu casa, descubrirás los problemas que pueden afectarte y cómo solucionarlos, también la forma de potenciar las diferentes zonas para atraer a tu vida aquello que más necesites: prosperidad, éxito, amor, salud, trabajo…
El libro
Con Ordena tu casa, cambia tu vida descubrirás el apasionante mundo del Feng Shui. Este libro te ofrece las herramientas apropiadas para mejorar tu vida y resolver todos tus problemas. Paso a paso, de una forma fácil y práctica, aprenderás a aplicar el Feng Shui en tu hogar.
Aplicando el mapa Bagua en el plano de tu casa, descubrirás los problemas que pueden afectarte y cómo solucionarlos, también la forma de potenciar las diferentes zonas para atraer a tu vida aquello que más necesites: prosperidad, éxito, amor, salud, trabajo…